¿Cómo entrenar para el camino de Santiago?

Nos faltan 7 días. En 1 semana, a estas horas estaremos completando (si todo sale bien), nuestra primera etapa del Camino de Santiago. Calculo que estaremos pasando por Herrerías o algún pueblo cercano y en mis piernas empezarán a pesar los kilómetros mientras no dejo de pensar en la frase que titula este artículo: ¿Cómo entrenar para el Camino de Santiago?

El caso es que no tengo ni idea de cómo hacerlo (nótese que el título está en formato pregunta y no es una afirmación; aquí no voy a contaros un tutorial de cómo entrenar). Bueno, más bien creo que sí sabemos cómo entrenar para el Camino, pero no lo he llevado a cabo.

Para el Camino de Santiago se entrena caminando, como es lógico, pero no he podido llevarlo a cabo; o no he tenido la fuerza de voluntad suficiente, que también puede ser. Envidio a esas personas que cuando llegan de trabajar después de un duro día, se cambian, se enfundan las zapatillas y se van a correr o caminar durante algunos kilómetros antes de la cena. A mi me cuesta mucho, y es posible que lo eche en falta en unos cuantos días.

Mi preparación para el camino se ha limitado a ir y volver del trabajo caminando y a salir estos dos últimos días aprovechando los festivos a caminar un poco por el campo. En total, unos 3,5 kilómetros diarios, 13 km el viernes y 15 ayer sábado. Vamos, lo justo para dar de sí las zapatillas y confiar en que la preparación psicológica sea más fuerte que la física.

Xiaomi MiBand: Mi cacharro tecnológico para el Camino de Santiago

Con la excusa de hacer el Camino de Santiago, hace unas semanas me compré mi primer wearable: La Xiaomi MiBand, la primera pulsera inteligente de la marca Xiaomi y el último accesorio/cacharro en entrar en mi casa.

¿Las razones para comprarla? Básicamente 3:

1. Me apetecía tener un wearable
2. Me paso el día comprando
3. El precio: A mi me costó menos de 20€ en Amazon.es; En 2 semanas la tenía en casa y sin complicaciones de webs en chino mal traducidas

La experiencia es bastante positiva hasta el momento, y en el Camino la utilizaré básicamente para intentar llevar un poco de control sobre los km que hacemos y luego poder detallar las rutas en el blog.

Además, tiene un monitor de sueño que te indica las horas y ciclos de sueño que has hecho la noche anterior; y detecta con bastante acierto las horas a las que te quedaste dormido y te despertaste por la mañana.

Pero, si hay una función que me ha encantado es la de la alarma. Más allá de que se supone que te despierta en el momento exacto en el que se acaba tu ciclo de sueño (con un margen de hasta media hora desde la hora en que la pusiste), para que no te despiertes cansado, el hecho de despertarte sin el «susto» de la alarma del móvil o la radio para mi es una delicia. Y es que la MiBand se dedica a despertarte con pequeñas vibraciones que van subiendo de intensidad según pasan los minutos hasta que detecta que te has levantado de la cama.

De momento me está acompañando todos los días y así lo hará también durante el camino: Es ligera, bastante cómoda y resistente al agua. Además, como me marqué un objetivo de entrenamiento no muy ambicioso, todos los días al llegar a casa me felicita por haber superado los 5.000 pasos diarios que me había marcado como marca.

En los próximos días aprovecharé para contaros muchas cosas que tengo pendiente antes de que partamos hacia Santiago: la mochila, las etapas que queremos hacer, etc.

Ahora voy a salir a caminar un rato, aprovechando que se ha quedado un buen día en Madrid.

Gastos del viaje: 17,10€
Gastos de material: 18€ (Xiaomi miband)
Faltan: 7 días